24 horas en Tolox, una sopresa agradable
Una vez aparcado en las afueras, nos adentramos al pueblo y enseguida vemos las pendientes cuesta arriba pero eso se sabe si vas a la Sierra de las Nieves. Llegamos a nuestro Hostal-Restaurante La Plaza localizado en pleno centro de Tolox al lado de la Policía Local. El personal muy amable y las habitaciones muy bien cuidadas de limpieza y totalmente bien equipadas con botella de agua, caramelos, productos de baño, bata y chanclas.
Comenzamos nuestra exploración por el casco antiguo del pueblo callejeando por las calles estrechas del pueblo donde antiguamente se encontraba el antiguo castillo de Tolox del cual no se conserva nada. Pero no quita el encanto que presenta las calles estrechas e inclinada para seguir paseando por las casas del pueblo con sus plantas y decoraciones típicas de Andalucía.
Junto a estas decoraciones andaluzas encontramos en sus calles arte urbano por parte de los artistas en los encuentros organizados por Art Tolox, durante nuestro paseo alrededor del pueblo hallamos pinturas coloridas, esculturas, murales con poemas y obras con ingenio que hace que el paseo por este pueblo obtiene aún más encanto.
Avanzamos hacia el famoso balneario de Tolox sobre el que habíamos leído, en nuestro camino hacía el balneario observamos enseguida el valle de Tolox y su naturaleza que refleja tranquilidad. Una vez llegado al Hotel del Balneario y el propio Balneario vemos que todo se encuentra cerrado durante la época del invierno. Ya volveremos al Balneario porque sinceramente crea gran curiosidad.
Junto al lado del Balneario observamos que es el inicio de varios rutas de senderismo, era ya tarde pero decidimos hacer la ruta del Charco de la Virgen, comenzamos cruzando el pequeño río y empezamos la subida adentrándonos en la naturaleza. Después de un camino de 2.4Km llegamos al charco de la Virgen, un lugar impactante, ya que las aguas de este curso se precipitan por una cascada de 20 m. A la vuelta por el sendero lineal nos encontramos con un rebaño de cabras de montaña por el senderos lo cual nos hace sentir aún más la naturaleza de la Sierra de las Nieves.
Volviendo hacia el pueblo por la Avenida San Roque nos paramos para una cerveza en Cafetería-Bar donde también nos pedimos un bocadillo de lomo en manteca, os recomiendo el sitio porque el bocadillo con la cerveza Alhambra fue de buena calidad a buen precio.
Nos dirigimos a la Calle Polito donde vemos una calle acogedor con varias terrazas con vistas sobre Tolox. Antes de acercarnos al bar vemos un quiosco típico con caramelos y artesanía creadas por el dueño, nos acercamos para comprar unos caramelos, los dueños del quisco son de Argentina, muy amables nos cuentan un poco sobre el pueblo y el estilo de vida, no olviden ir a comprar unos caramelos cuando pasan por Tolox. Enfrente encontramos el Restaurante-Bar La Alberca, terraza amplia con vistas sobre Tolox donde nos tomamos una cerveza disfrutando del anochecer sobre el valle y las vistas.
Llega la hora de la cena, cuando hicimos el check-in en Hostal La Plaza, vimos que tiene un restaurante acogedor justo al lado y decidimos cenar dentro de nuestro Hostal. El servicio del restaurante super pendiente de nosotros si estamos cómodo. La carta tiene platos típicos de lugar y algunos con toque asiático. El precio de los platos es medio-alto, pero la calidad de la comida es muy buena. Hablamos con el Chef Sergio y nos cuenta que había vivido varios años en Tailandia cosa que se nota en sus platos elaborados. Al día siguiente el desayuno muy bien cuidado con pan del día, charcutería fresca y quesos buenos.
Preguntamos donde podemos tomar algo un sábado noche, nos comentan que hay una discoteca en la calle cuesta pero que en invierno no se encuentra abierta. Nos dirigimos al Café-Bar V&R donde llegamos a un bar de copas donde se puede jugar al billar y dardos y disfrutar de un buen ambiente.
Y aquí termina nuestra Aventura de Tolox, volveremos para más y mejor!
Para más información sobre Tolox: visita la pagina del Ayuntamiento